Filósofo
griego
Nació en la isla de Samos en el seno de una familia
ateniense. Fue el primer filósofo de la etapa helenística.
Hijo de un maestro que lo educó junto a varios filósofos.
Cuando cuenta 18 años viaja a Atenas para cumplir
con el servicio militar. En el 322, se reunió con
su padre en Colofón, donde empezó a enseñar.
Sobre el 311, fundó una escuela filosófica
en Mitilene, isla de Lesbos, y posteriormente fue director
de una escuela en Lampsaco (hoy, Lâpseki, Turquía).
Se radica en Atenas en el 306 y enseña sus doctrinas. La sabiduría consiste, para él, en una comprensión
que permita al hombre ser feliz. La felicidad, según
Epicuro, consiste en el placer (gr. hedoné); el hedonismo
epicúreo juzga que el deseo natural de felicidad es
idéntico al deseo de placer. Estableció en
el jardín de su casa una escuela, el Jardín,
cuyas enseñanzas competían con los legados
de las de Platón y Aristóteles. Tanto las mujeres
como los hombres frecuentaban este lugar, lo que provocó calumnias
sobre las actividades que allí tenían lugar.
Estudiantes de toda Grecia y Asia Menor acudieron para incorporarse
a la escuela de Epicuro. Según el historiador y biógrafo
del siglo III d.C. Diógenes Laertes, a su muerte dejó 300
manuscritos, incluyendo 37 tratados sobre física y
numerosas obras sobre el amor, la justicia, los dioses y
otros temas.
De sus escritos, sólo se han conservado
tres cartas y algunos fragmentos breves, incluidos en la
biografía de Diógenes Laertes. Las principales
fuentes sobre las doctrinas de Epicuro son las obras de los
escritores romanos Cicerón, Séneca, Plutarco
y Lucrecio, cuyo poema De rerum natura (De la naturaleza
de las cosas) describe el epicureísmo en detalle.
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